De repente
estaba volando
el viento levantó su vestido
rosa chicle
a lo Marilyn
y se sintió una diva
y se sintió una diva
se miró los dedos de una mano
de la otra
de la otra
tatuados en movimiento
sobre un turquesa de cuento
y fresca como una sandía
agradeció
los ojos de los pájaros.
agradeció
los ojos de los pájaros.